Llevaba un tiempo sin escribir nada y es que han sido quince días extremadamente largos. Por poco termino de escribir estas líneas desde Madrid, con todos los cambios que conlleva. Parece mentira pero la frase que más me han dicho es que ya estoy mayor. ¡Increible! Y lo cierto es que uno empieza a notar ciertas cosas inquietantes, algunas actitudes y, sobre todo, pequeños detalles que me hacen añorar mis 18 añitos, imberbe y asilvestrado…
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diego
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Bueno, ahora sólo queda saber cómo será el disco. El título promete: Que el cielo espere sentao.