Más que fe o esperanza, empiezo a creer que lo mío es cabezonería. Después de leer cómo José Luis Alvite dejaba de escribir en El Faro de Vigo, no he dejado de visitar la web del periódico una vez por semana por sí, en una de éstas, se volvía a presentar por allí.
Al final, tanto va el cántaro a la fuente, que vuelve con agua. A día de hoy, Alvite no ha vuelto al periódico gallego pero sí ha continuado escribiendo sus historias del Savoy en La Razón (no lo enlazo porque, sencillamente, no hay nada en este diario que me guste), aunque sólo se podían leer los primeros treinta caracteres, una frase y media. Pero la política del diario ha cambiado y ahora sí permiten leer la columna completa, con lo cual, el Savoy vuelve a estar disponible.
A ver si este evento nos ayuda a retomar nuestras historias del Savoy.