estimados señores/as – El sueño del mono loco
El sueño del mono loco Saliva, cinismo, locura, deseo…

estimados señores/as

Estimados señores/as propietarios de las grandes cadenas de ropa para mujeres de España, Inditex, Mango, El Corte Inglés, etc… ¿cómo pueden ser tan cutres? No soy ningún especialista pero, me imagino que a diferencia de los centros comerciales donde ponen esa música machacona y repetitiva para que la chusma, los clientes, compren rápido y se vayan, a vds, estimados señores, lo que más les interesa es que las mujeres se pasen el día entero entre sus expositores, dando vueltas, probándose la ropa, mirando y admirando la mercancía. La mayoría de las veces, las mujeres van de compras acompañadas de sus parejas que no tienen nada que hacer por allí, a excepción de sujetar la ropa y hacer cola para pagar. Entonces y perdón por la insistencia, ¿cómo pueden ser tan cutres? ¿Cómo pueden no darse cuenta?

Imagínense el siguiente escenario: Badajoz, sábado, cuatro menos diez de la tarde, cuarenta y pocos grados en la calle, veintitantos en el Zara de cuatro plantas de Menacho. Mirando a mí alrededor conté media docena de parejas, ellas a la caza y captura de ese modelito ideal (eme entre ellas) y ellos, bueno, cada uno hacía lo que podía. Un tipo estaba sentado en las escaleras que comunican las plantas con claro aire de enfado, otro se había apoyado en un mostrador y escuchaba la radio a través del móvil y un tercero se afanaba en perseguir a una niña pequeña. El resto estábamos más o menos cerca de nuestras parejas, siguiendo la evolución de la caza y la trayectoria con la mirada. Sin hacer nada. Enredando con el móvil, cruzando la vista con otro en idéntica situación y encogiendo los hombros o apurando a quien no tiene ninguna prisa y poniendo cara de fastidio al ver que no se perciben las señales. Si el objetivo es mantener a la gente en la tienda el mayor tiempo posible, denles un motivo para quedarse a los que no tienen ganas de estar allí, ni tampoco de salir afuera al fresco de los cuarenta grados.

En resumidas cuentas, ¡pongan wifi en sus establecimientos, carajo! Sólo necesitamos un motivo para quedarnos, uno sólo y únicamente tenemos motivos para irnos. Pongan wifi e, incluso, nos patearemos la sección de niños y nos compraremos jerseys en agosto. Prometido.

PD Aprovechando que no tenía nada mejor que hacer, comprobé qué locales tenían habilitada algún tipo de señal wifi y, como no, únicamente El Corte Inglés cuenta con ella pero más protegida que Fort Knox.

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