Hasta ayer, eme y yo hemos estado en Madrid, de visita, de compras, de farra y de comilona. Menos mal que alguien se acuerda de los sufridos trabajadores (insisto en que yo, personalmente, no me quejo) y nos dan un día al año para hacer lo que más nos gusta: no trabajar.
Pero claro, esto no deja de ser España (una España cateta y gris. parafraseando – a mi manera- a Pérez-Reverte) y todo Madrid coge su seiscientos nuevecito, con la baca en el techo y la suegra en la parte trasera, los niños, la mujer y el loro y se van tres días a Benidorm. Para nosotros, que viajamos el sábado por la mañana y el lunes por la tarde, los atascos de cien kilómetros simplemente, no existieron.
Por lo demás, lo pasamos muy bien, comimos comida japonesa de alto nivel (a juzgar por la factura), y vimos algunas obras de arte que adornan el barrio de Salamanca…
PD hoy, tres de mayo de 2005 es el día mundial contra el asma. Otro día más, viejo enemigo, que no haces bien tu trabajo.