Al me advirtió que una vez había oido al cronista del Clarion Chester Newman que en esta ciudad dejar un trabajo no era un lujo, era un pecado. Aunque para un tipo como tú un trabajo no es un lujo, es un milagro.
El guaje ha vuelto por el Savoy dos meses después de la última aparición y, aunque algunos dirán que no somos muy prolíficos, nosotros preferimos pensar que tenemos ritmo.
Una idea sobre “historias del Savoy – un pecado”
Cierto, un ritmo de marcha fúnebre, pero ritmo…