Después de estar un par de meses (o quizá tres) tocando las narices con el tema, la semana pasada me lancé y me compré un teleobjetivo para la cámara de fotos. El aparato en cuestión es un Tamron 70-300, con el nombre en clave AF70-300mm F/4-5.6 Di LD Macro pero que, debido a mi facilidad para recordar números y letras, será apodado el gordo.
Este fin de semana largo, aprovechando que en el pueblo de eme hacían una fiesta para guardar a la virgen en una iglesia, me dejé tentar por la idea de una excursión fotográfica y nos fuimos para allá. El domingo, el día de autos, nos despertaron los truenos y la tormenta a eso de las seis y pico de la mañana que anunciaban que la mitad de la excursión ocurría bajo la lluvia. Así fue, de hecho, pero ya metidos en harina unas cuantas gotas no nos iban a hacer retroceder y, con todo, salimos a caminar.
El trayecto comienza en el pueblo de eme y transcurre por la dehesa que hay hasta el siguiente pueblo, entre carreteras nacionales y comarcales. A partir de ahí, se toma una carretera secundaria que va hasta la iglesia, donde se hace una fiesta con comida y bebida.
El objetivo nuevo, el gordo, supone un cambio muy grande en mi forma de sacar fotografías, sobre todo en la manera de preparar la foto, porque me cambia las distancias que ya tenía asumidas. A partir de ahora, con este trasto, las cosas se ven más cerca y no hay que acercarse al objetivo, con lo que se gana en frescura y en procesado de la imagen.
2 ideas sobre “acércate más…”
¡es impresionante¡ parece un objetivo profesional, tendrás que te ir acostumbrando poco a poco. Besos
en ello estoy. No te creas que es fácil, nada más calzarlo en la cámara te cambia el punto de vista. Se acerca más y tiene un pelín más de luminosidad que el de siempre, el pisapapeles.
En breve pondré alguna foto hecha con él.
besos.