Mi abuela ha encontrado, en un CD que le regalamos hace siete años, un email felicitándole su septuagésimo tercer cumpleaños. Escuchó un concierto en La 2 y recordó que sus nietos le habían regalado un disco del barítono Carlos Álvarez, lo buscó y continuó el concierto en casa, a todo volumen como acostumbra. Al terminar, un pico de papel sobresalía de la caja y, tirando, tirando, apareció un papel que no había visto antes, en siete años.
Se trataba de un email, redactado un par de días antes del cumpleaños y que el hermanín recibió, imprimió y ocultó con primor. Porque para esconder un folio de papel en una caja de CD cuyo contenido está expuesto un mes y otro también, durante esos años, hay que tomárselo muy en serio. En él, en el email, le felicitábamos el cumpleaños a güelita gloria, le hablábamos del disco que iba adjunto y, al final, le pedía al hermanín que firmase por ambos con unos garabatos.
Ayer, güelita lo encontró y dio saltos de alegría por una felicitación que llegó siete años tarde. Hoy me ha llamado, me lo ha contado y nos hemos reído. Sobre todo porque hace siete años que mi abuela recibe correos electrónicos.
2 ideas sobre “un email del pasado”
Bonita historia y curiosa, sobre todo conociendo a Güelita, ella es de mirar y revisar las cosas, cómo estaría de bien colocado el email qué le pasó desapercibido, fué sorprendente despues de haber manipulado cientos de veces el Cd, descubrir que se escondía allí durante tantos años. Besinos