Sinceramente, cuando hace un par de meses vi en la agenda que el blog cumplía veinte años y me propuse escribir una entrada conmemorativa, no pensé que fuese a ser tan difícil. Creía que como se trata de una fecha tan redonda, el texto saldría sólo y esta entrada conmemorativa […]
Fue un pinchazo rápido, duró un segundo y apenas me dio tiempo a sentir la aguja. Admito que me sentí decepcionado por la brevedad del instante más trascendente para mi en el último año y medio porque, si la duración del pinchazo hubiese sido proporcional a su importancia, ese segundo, […]
Hoy ha tocado despedirse de Leoncio definitivamente porque a mediodía el hermanín y mi padre lo han llevado al desguace. Si despedirme del Cinco me llevó un fin de semana completo, esta despedida ha sido amarga, triste, remota y breve. No sé si pedirle al hermanín que se despida de […]
Dieciseis años escribiendo en El sueño del mono loco, en el mono loco según algunos amigos. Este año no voy a hacer la típica entrada donde recopilas el número total de entradas, el número de comentarios ni ninguna otra estadística más destinada a acariciar el ego que a otra cosa. […]
Cuando yo era pequeño, allá por los ochenta, los coches ocupaban un espacio muy importante en el imaginario colectivo, casi a la misma altura que la televisión. Había uno por familia y era considerado un miembro más, uno útil porque llevaba y traía al resto de miembros allá donde hiciera […]
Dicen que el gusto es el sentido con más capacidad de transportarnos a otra época y lugar, simplemente saboreando algo que ha permanecido en nuestro cerebro durante décadas. Para mi el oído es el segundo catalizador, sólo necesitas una canción, un tarareo, una insinuación y vuelas a otro tiempo. Hace […]
–¡Roto! ¡Roto, roto, roto, roto, roto! –¿Qué dices cariño? ¿Qué está roto? –¡Tu diente está roto! Tienes un diente roto, papá. Diálogo surrealista con Hugo, este pasado fin de semana